Es una de las preguntas más frecuentes que nos plantean nuestros pacientes. Aquí siempre respondemos que es el propio paciente el que debe decidir si quiere entrar a consulta acompañado o prefiere pasar solo. La información de los que conviven con el paciente o mejor le conocen siempre es útil para el terapeuta. Un formato que a nosotros particularmente nos gusta es que el paciente entre al principio solo, para que puede expresarse con plena libertad y a mitad de la entrevista o cuando se acerque el final, avise a sus acompañantes acordando previamente con el terapeuta la cantidad de información que se le va a transmitir a los mismos (simplemente tranquilizarlos o explicarle impresiones diagnósticas sin entrar en detalles de la vida privada o hablar con total libertad de todo lo que el paciente ha planteado en consulta). Pero insistimos: es el paciente el que decide cómo, quién y cuándo entran los acompañantes a consulta.